miércoles, 28 de enero de 2015

Medicina alternativa en Guatemala


La medicina complementaria y alternativa (CAM) es un grupo de sistemas diversos de cuidados médicos y de salud, de prácticas y productos que no se consideran por ahora que forman parte de la medicina convencional. Aunque hay alguna evidencia científica con respecto a algunas terapias de la medicina complementaria y alternativa, para la mayoría de ellas hay preguntas clave que todavía están por aclararse por medio de estudios científicos bien diseñados. Hay preguntas tales como si estas terapias no perjudican y de si funcionan para enfermedades o situaciones médicas para las que se usan.
Aunque están agrupadas, la medicina complementaria y la alternativa son diferentes una de otra. La medicina complementaria se usa junto con la medicina convencional. Un ejemplo de terapia complementaria es el uso de aromaterapia para ayudar a reducir las molestias del paciente después de una cirugía. La medicina alternativa se usa en vez de la medicina convencional. Un ejemplo de una terapia alternativa es el uso de una dieta especial para tratar el cáncer en vez de someterse a cirugía, a radiación o a quimioterapia recomendadas por un practicante de cuidados médicos convencionales.
El Centro Nacional para la Medicina Complementaria y Alternativa (NCCAM) de los Estados Unidos ha clasificado las terapias de la medicina complementaria y alternativa en cinco grupos:
  1. Sistemas médicos alternativos (medicina homeopática, medicina tradicional china, etc)
  2. Intervenciones corporales y mentales (por ejemplo, visualización y relajación)
  3. Métodos de manipulación que utilicen el cuerpo (la quiropráctica y el masaje)
  4. Terapias basadas en la biología (por ejemplo, las vitaminas y productos herbarios); y
  5. Terapias de energía (por ejemplo, el qi gong y el toque terapéutico).         
¿Es generalizado el uso de terapias complementarias y alternativas?
Los resultados de estudios del uso de la medicina complementaria y alternativa han sido inconsistentes. Un estudio a gran escala publicado en el número de noviembre 11 de 1998 del Journal of the American Medical Association encontró que el uso de la medicina complementaria y alternativa entre el público en general aumentó de 33.8% en 1990 a 42.1% en 1997. Sin embargo, un análisis de datos de la National Health Interview Survey de 1999 indicó que solo 28.9% de los adultos de Estados Unidos han usado al menos una terapia de medicina complementaria y alternativa. Estos resultados fueron publicados en la revista Medical Care en 2002.
Varias encuestas se han llevado a cabo en un número reducido de pacientes sobre el uso que hacen de la medicina complementaria y alternativa los pacientes con cáncer. Un estudio publicado en el número de febrero de 2000 de la revista Cancer informó que el 37% de 46 pacientes con cáncer de próstata usaron una o varias terapias de la medicina complementaria y alternativa como parte de su tratamiento para el cáncer. Estas terapias incluyeron remedios herbarios, vitaminas y dietas especiales.
Un estudio más grande del uso de la medicina complementaria y alternativa en pacientes con diferentes tipos de cáncer fue publicado en el número de julio de 2000 del Journal of Clinical Oncology. Este estudio encontró que 69% de 453 pacientes con cáncer habían usado al menos una terapia de medicina complementaria y alternativa como parte de su tratamiento. Se puede encontrar información adicional sobre el uso de medicina complementaria y alternativa entre pacientes con cáncer en un artículo publicado en Seminars in Oncology de diciembre 2002.
Es importante que la misma evaluación científica rigurosa usada para evaluar los métodos convencionales se use para evaluar las terapias de la medicina complementaria y alternativa. El Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos (NCI) y el Centro Nacional para la Medicina Complementaria y Alternativa están financiando un número de estudios clínicos en centros médicos para evaluar las terapias de la medicina complementaria y alternativa para el cáncer.
El Instituto Nacional del Cáncer y el Centro Nacional para la Medicina Complementaria y Alternativa patrocinan actualmente varios estudios clínicos de tratamientos complementarios y alternativos para cáncer. Algunos de estos tratan de los efectos de los métodos complementarios que se usan además de los tratamientos convencionales, mientras que otros comparan las terapias alternativas con los tratamientos convencionales. Los estudios actuales son los siguientes
  • acupuntura para reducir los síntomas de cáncer avanzado de colon y recto,
  • quimioterapia de combinación más radioterapia con o sin cartílago de tiburón en el tratamiento de pacientes que tienen cáncer de pulmón de células no pequeñas que no se puede extirpar con cirugía,
  • terapia de oxigenación hiperbárica en pacientes de laringectomía (personas que han tenido una operación para extirpar toda la laringe o una parte [caja vocal]),
  • curación a distancia en el tratamiento de cáncer de cerebro,
  • quimioterapia comparada con terapia de enzima de páncreas para el tratamiento de cáncer de páncreas, y
  • extracto de muérdago y quimioterapia para el tratamiento de tumores sólidos.             
Los pacientes con cáncer que usan o están considerando usar alguna terapia complementaria o alternativa deberán consultar esta decisión con su médico o enfermera, como lo harían con cualquier otra forma de terapia. Algunas terapias complementarias y alternativas pueden interferir con el tratamiento estándar o pueden ser dañinas cuando se usan con tratamiento convencional. También, es una buena idea informarse de la terapia, incluyendo de si los resultados de estudios científicos apoyan lo que se dice de ella.
¿Qué beneficios se pueden esperar de esta terapia? ¿Cuáles son los riesgos relacionados con esta terapia? ¿Superan los beneficios conocidos a los riesgos? ¿Qué efectos secundarios se pueden esperar? ¿Interferirá la terapia con el tratamiento convencional? ¿Es esta terapia parte de un estudio clínico? Si es así, ¿quién patrocina el estudio? ¿Cubrirá el seguro médico esta terapia?                             
Bibliografía
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